NEUROLOGÍA, ENFERMEDADES DEGENERATIVAS: Investigadores del Instituto Cajal curan en ratones la ataxia cerebelar L. A., Madrid. Un equipo de investigadores del Instituto Cajal, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha logrado eliminar en ratas de laboratorio el llamado síndrome de ataxia cerebelar mediante la administración del factor de crecimiento IGF-1. Esta enfermedad, de menor frecuencia en humanos que otras también neurodegenerativas, afecta a entre dos y cuatro personas por cada 100.000, y sus causas aún son desconocidas. Provoca una destrucción neuronal que se traduce en una progresiva pérdida del movimiento hasta la inmovilidad absoluta.
El grupo, dirigido por Ignacio Torres Alemán e integrado por Ana María Fernández y Alberto González de la Vega, publicó su trabajo el pasado martes en la revista Proceedings, de la Academia Nacional de Ciencias de EE UU. Los investigadores desarrollaron un modelo experimental de ataxia cerebelar en ratas, provocando con una neurotoxina una destrucción selectiva de neuronas en un circuito del cerebelo denominado olivo-cerebelar y relacionado con el control del movimiento. "De esta forma", explica Torres Alemán, "nos aproximamos a las manifestaciones clínicas de la ataxia cerebelar en humanos".
La posterior administración del factor de crecimiento IGF-1, en diversos tiempos y por distintas rutas, provocó en las ratas atáxicas una recuperación permanente de los movimientos perdidos, mediante la regeneración de aquellas neuronas que habían resultado dañadas.
El resultado no sólo supone la eliminación de la ataxia en ratones con un factor de crecimiento, sino también el hallazgo de que el tratamiento es eficaz por vía subcutánea. Hasta ahora este tipo de terapias debía aplicarse vía intracerebral. Está previsto un ensayo clínico en humanos en colaboración con el departamento de Neurología del hospital Valdecilla de Santander.
Tres científicos del Instituto Cajal del CSIC han logrado recuperar la coordinación motora de ratas con ataxia cerebelar, mediante la administración de un factor de crecimiento. Este estudio, que destaca hoy "Proceedings" de la Academia Nacional de Ciencias de EE.UU., supone un esperanzador avance contra esta enfermedad humana que carece de tratamiento eficaz.
El síndrome de ataxia cerebelar afecta al sistema nervioso central y provoca una progresiva dificultad de movimientos, hasta llegar a la inmovilidad absoluta. A pesar de que su incidencia -dos casos cada cien mil habitantes- es mucho menor que la de otras patologías neurodegenerativas, como las enfermedades de Parkinson y Alzheimer, tiene un impacto social importante. Actualmente no hay tratamiento para esta enfermedad, que aparece en cualquier momento de la vida y cuyas causas moleculares son desconocidas.
Para lograr un tratamiento, Ignacio Torres Alemán, Ana María Fernández y Alberto González de la Vega utilizaron como modelo experimental ratas, a las que selectivamente se eliminó con una neurotoxina las neuronas del cerebelo que participan en el control de los movimientos. Posteriormente, administraron a las ratas atáxicas el factor de crecimiento IGF-1 , en diversos tiempos y por diferentes rutas. En todos los casos, según los científicos, los animales recuperaron la coordinación motora, siendo su comportamiento idéntico al de las ratas sanas y sin efectos secundarios. La molécula administrada pertenece a la familia de factores de crecimiento similares a la insulina y juega una importante función en el desarrollo cerebral y en el cerebro adulto. Ya ha sido utilizada en otras patologías humanas, como la diabetes, el enanismo y la esclerosis lateral amiotrófica.
Estos científicos señalan que los resultados del estudio son esperanzadores, pero subrayan que es un trabajo experimental de laboratorio y no se puede adelantar el efecto de esa terapia en seres humanos. El equipo del CSIC colabora con el doctor José Berciano, jefe del departamento de Neurología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla (Santander), donde empezará pronto un ensayo clínico piloto en el que se administrará este factor a personas con ataxia cerebelar.
El CSIC señala que este estudio es el primero donde se demuestra que un factor de crecimiento cura, en ratas, una enfermedad neurodegenerativa de forma completa y permanente. Además, señalan que esta molécula podría ser eficaz en pacientes con neurodegeneración muy avanzada.
NUEVA YORK (Reuters)-- Experimentos de laboratorio sugieren que una substancia similar a la insulina conocida como IGF-I puede ayudar a restaurar la coordinación motora que se pierde en personas con ataxia cerebral, una enfermedad que afecta al control muscular y a la forma de caminar debido a lesiones en el cerebelo del cerebro. Actualmente, la enfermedad es intratable.
Investigadores del Instituto Cajal de Madrid, España, dicen que sus hallazgos en ratas de laboratorio con ataxia cerebral experimentalmente inducida indican que el tiempo es un factor importante en el tratamiento.
Cuanto antes se administrara IGF-I, mas se ayudaba a la recuperación de células en cerebro. Además, los investigadores observaron que las ratas recuperaron completamente el control motor tanto si la substancia se administraba directamente en cerebro o por vía subcutánea.
Este equipo investigador hace notar que los pacientes con ataxia cerebral no son tan comunes como aquéllos con otras enfermedades neurodegenerativas como las enfermedades de Alzheimer o Parkinson. Sin embargo, ellos señalan que la "falta completa" de cualquier tratamiento eficaz hace que sus descubrimientos sobre IGF-I sean de "un interés social significativo". Además, ellos apuntan que IGF-I se esta probando actualmente en otros desórdenes neurológicos, incluso en la esclerosis lateral amiotrófica, también conocida como la enfermedad de Lou Gehrig. "Así, su posible uso en el tratamiento de la ataxia cerebelosa humana es muy prometedor", los investigadores concluyen.
La ataxia cerebelar pueden ser debida a daño en el cerebelo (la parte del cerebro relacionada con la coordinación) o en a las vías nerviosas que llevan información dentro y fuera del cerebelo. Entre las posibles causas se incluyen infartos, tumores cerebrales, intoxicación alcohólica, y esclerosis múltiple, u otros tipos de degeneración del sistema nervioso.
4- TRATAMIENTO DE ATAXIAS CON IGF-I, 6/2/1998. (Por el Doctor Torres-Alemán. (Carta facilitada por Tomás
Hernández).
Estimado Sr. Hernández: En primer lugar mis disculpas por no haberle contestado antes pero me ha sido difícil de disponer de suficiente tiempo. Respecto a la información que me pide he procurado dar toda la que tenemos a los periodistas y sólo puedo añadir que en cuanto tengamos los primeros resultados en seres humanos el Dr. Berciano en Valdecilla o yo mismo nos pondríamos en contacto con su asociación para que estuvieran al día. Tenemos bastantes esperanzas de que en al menos algunos tipos de ataxia el tratamiento sea eficaz, pero de momento sólo son esperanzas. Si considera insuficiente la información que le proporciono hágamelo saber e intentaré ser más explícito, pero como sólo tenemos resultados en animales de laboratorio, dar mas detalles me parece innecesario. Muchas gracias por su interés. Un cordial saludo, y ojalá que pueda dentro de poco darle buenas noticias!!.
Estimado Sr. Hernández: En relación a cuando comenzará el ensayo clínico en Valdecilla, ayer estuve en contacto con la compañía de biotecnología que nos va a ayudar a realizarlo, y por causas ajenas a nosotros parece que se va a retrasar un poco el comienzo (llevo ya casi 1 año intentando llevarlo a cabo pero parece que siempre surge algún nuevo obstáculo). Un punto en que quizás ustedes pudieran contribuir a agilizar el comienzo es en la autorización por parte del Ministerio de Sanidad del protocolo de ensayo clínico. Dado que el medicamento que emplearíamos ha sido ya utilizado en seres humanos, ha sido aprobado por la FDA también y recientemente por el Ministerio Español para el uso en ELAs, no creo que pongan impedimentos solo que al parecer el trámite de por si puede llevar 1 mes y medio. Si ustedes como asociación presionaran quizás lo tramitarán más deprisa. De momento nosotros lo vamos a pasar por el comité ético de Valdecilla ya que este paso es previo a su autorización ministerial. Cuando tenga mas información se la haré llegar. Un saludo cordial,
Respecto a la sugerencia de Ignacio Torres de que las Asociaciones hagamos presión sobre el Ministerio, al final de este mensaje te pego el que he enviado a la Asociación Valenciana. Espero su contestación. No obstante, yo por mi parte estoy buscando algún contacto con acceso al Ministerio. Por otro lado, he escrito la carta que te adjunto al Dr. Berciano del hospital Marqués de Valdecilla.
"Eugenia y Paco: Os supongo informados del descubrimiento de los investigadores del Instituto Cajal, de la movida que en torno a esto se ha ido formando en nuestro colectivo y concretamente de las comunicaciones que Ignacio Torres le ha echo a Tomas Hernández. En la última, se queja de trabas burocráticas que están retrasando el comienzo de la experimentación en humanos por más de un año ya, y pide si desde las asociaciones podemos echar una mano. Dice Tomás que se va a poner en contacto con vosotros para trasladaros esta petición. Yo creo que debemos intentarlo y mejor en conjunto las cuatro asociaciones. Esto es un ejemplo pintiparado de aquella colaboración que habíamos hablado hace un par de meses y que tenemos pendiente de articular".
Estimado Doctor: Soy el Presidente de la Asociación Madrileña de Ataxias Hereditarias (AMAH). Hemos tenido conocimiento a través de la prensa, del esperanzador descubrimiento realizado por el equipo de investigación del Instituto Cajal del CSIC , dirigido por Ignacio Torres, acerca de los experimentos efectuados en ratas y que según esa misma noticia tendrá continuación en una segunda fase a realizar en pacientes humanos dirigida por Vd.
Como Vd. sabe, este tipo de noticias pueden provocar expectativas infundadas o por lo menos exageradas cuando no se fija bien su alcance exacto. En este sentido, le ruego una valoración de la noticia y de las perspectivas que se abren, para transmitirla a nuestros asociados en sus justos términos. También debo pedirle que nos permita ir conociendo el desarrollo del proceso y cualquier novedad significativa que se produzca.
Perdone Doctor mi atrevimiento. Me han animado a acudir a Vd. con estas peticiones, la razón expuesta más arriba y sobre todo alguno de nuestros asociados a quién Ud. trata, singularmente José Montoro que le envía un afectuoso saludo.
Por último, no me resta sino ofrecerle la colaboración de la Asociación y de mí mismo, desearle mucho éxito (también por la cuenta que nos tiene) y agradecerle su labor de tantos años en pro del conocimiento de la ataxia.
Aparte de lo que nos ha contado el Dr. Ignacio Torres, y de las gestiones que Paco Llimerá (presidente de la Asociación de Ataxias de Valencia, en copia) está haciendo para enviar una petición al Mº de Sanidad solicitando la agilización de los trámites de aprobación de los ensayos clínicos en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, yo me he enterado, de forma particular, a través de una ATS que trabaja allí (que es familiar de un vecino mío), que el equipo del Dr. D. José Ángel Berciano Blanco, tiene ya preparado el protocolo para los ensayos, e incluso elegido un grupo de 10 afectados a los que empezarían a suministrarles el IGF-I.
Aunque la mayoría de nosotros estaríamos dispuestos a pertenecer a ese grupo de elegidos, creo que no debemos ni desanimarnos, ni intentar presionar al Dr. Berciano para que nos incluyan, ya que necesariamente los ensayos se deben llevar a cabo con un grupo reducido y ellos llevan mucho tiempo estudiando y preparando concienzudamente los mismos. Al contrario, debemos animarlos y ayudarlos a que comiencen cuanto antes, porque si los resultados son satisfactorios, podemos tener la seguridad que todos los equipos de neurología del todos los hospitales que se precien comenzarán pruebas similares.
En primer lugar, Tomás, quiero agradecerte en nombre de todos tus esfuerzos para que todos estemos bien informados en este tema y lo hago extensible a todos.
Como has contado que ya hay un grupo de 10 elegidos para los ensayos clínicos con IGF-1, me gustaría (y a otros de los lectores de estos correos) saber si entre esas 10 personas se encuentra algún afectado de Ataxia Cerebelosa o a todo tipo de ataxias. (Antonio J).
Estimados amigos: Desde mi pantalla me hago eco de todas las informaciones, matizaciones y sugerencias. Sin desmerecer [por supuesto] los esfuerzos de Tomás, creo que todos nos hemos movido un poco y todos somos merecedores de nuestras propias felicitaciones.
Hace unas fechas, yo he preguntado eso mismo en INTERNAF. "Amigo Fraser: Por favor, podría usted explicar de forma sencilla: ¿qué importancia tienen los nuevos descubrimientos científicos de IGF-I en FAers?. Un abrazo..."
Nadie ha respondido. Sinceramente, creo que la pregunta no tiene respuesta. Estaríamos ante el error al que pueden conducir los diferentes conceptos de la ataxia. Para nosotros los afectados y gente de a pie [de silla de ruedas ;-)] la ataxia es una enfermedad, y para los científicos la ataxia es un conjunto de síntomas. Y el IFG podría ??????? actuar sobre la mejora de coordinación de movimientos, pero jamás sobre la causa o sobre los efectos típicos o atípicos de determinado tipo de ataxia. Yo pido mucha cautela al recibir estas nuevas, porque un exceso de euforia puede conducir a la desilusión. No debemos dejarnos deslumbrar por el exceso de SENSACIONALISMO de la Prensa.